Corroborar una vez más que para el sistema judicial es legal torturar, filmar a una persona agonizante y fusilarla con un tiro en la sien, para luego hacer desaparecer su cuerpo por varios años. Sostener también que esto constituye un acto de legítima defensa, no deja de causarnos escalofríos.

Para quienes luchamos contra la impunidad y por la justicia, estos actos jurídicos que atentan contra la vida y consagran las conductas policiales criminales nos llenan de desprecio para estas instituciones que premian las conductas de odio y humillación para con la vida de lxs jóvenes de las barriadas populares, hostigándolos, torturándolos y llegando incluso a causarles la muerte.

No podemos imaginar el doble dolor que deben estar padeciendo lxs familiares de los jóvenes “Kiki” Lezcano y Ezequiel Blanco, que durante estos años y pese a los ataques recibidos por parte del estado -incluso durante el juicio-, siempre apelaron a la razón y esperaron justicia, para terminar escuchando un fallo lleno de criminalidad.

En estos momentos, donde no debe haber consuelo, queremos abrazar calurosamente a todxs lxs familiares de Kiki y Ezequiel y acuerpar especialmente a Angélica y Julieta, que acompañaron a Rosa y Eduardo en el inicio del juicio por el asesinato de David Moreno en Córdoba.

Saludamos fraternalmente a quienes acompañaron el pedido de justicia y sumamos nuestra voz al grito de ¡¡¡Basta de Impunidad!!!

El estado es culpable.