A tres años de la desaparición del joven de 19 años, Facundo Rivera Alegre, organizaciones sociales, políticas y de DDHH, y familiares víctimas de la represión del estado, realizaron diferentes actividades en pedido de aparición de Facundo y de justicia. El pasado 18 del corriente se conoció que el juicio ya tiene fecha, será el 18 de mayo de 2015, lo resonante de la cuestión es que en el banquillo de los acusados no haya ningún efectivo policial a ser juzgado a pesar que de las investigaciones efectuadas surge como mínimo la complicidad policial en el hecho de desaparición.
Entre las actividades realizadas por la fecha, durante la mañana se intento tener una reunión con el fiscal Gustavo Dalma de la cámara 11 del crimen, donde se acercaron familiares de otras víctimas de la represión del estados como Vanesa Orieta, hermana de Luciano Arruga. Otra de las personas presentes fue la madre de Jonathan “Kiki” Lezcano, Angélica Urquiza, la madre de Cristian Guevara, Maria Emilia Rojas, la madre de Were Pellico y la hermana de Paola Acosta, a los que se sumaron legisladores provinciales del FIT, representantes de la Mesa de Trabajo por los DDHH de Córdoba y representantes de la Coordinadora Antirrepresiva de Córdoba.
Luego de intentar impedir el acceso de algunas de las personas que acompañaban a Viviana a la cámara 11 del crimen, se sostuvo una álgida y poco afortunada conversación con la secretaria del fiscal, quien se negó a recibir a las personas presentes, e indico que “no eran ellos quien debían buscar a Facundo sino su madre”, y que debían retirarse pues no serian atendidos sino eran querellantes en la causa, al final solicito a la policía que retirara a las personas frente a la ventanilla de la dependencia, sin dar explicación del motivo. Acto seguido un policía escolto a Viviana Alegre, junto al abogado de la familia, y a los familiares y personalidades presentes.
“Son días difíciles los cercanos a esta fecha, como también es doloroso saber que le llega a juicio sin ningún policía acusado en el banquillo.” Declaro a la salida de Tribunales II, Viviana. “Nunca ha sido satisfactoria ni favorable las respuesta de esta fiscalía ni de la anterior y el trato recibido hoy da cuentas de eso”, concluyo reflexiva la madre del joven. También agradeció la presencia de la hermana de Luciano Arruga y de la madre de Kiki Lezcano, como símbolo de lucha contra la impunidad.
En este sentido, Vanesa Orieta lamento el trato recibido por parte de la fiscalía y recordó “cuando empezamos a golpear puertas en tribunales de Buenos Aires nos trataron en estos términos muchísimas veces, como acá ahora, con la diferencia que ya pasaron tres años”, y recalco que “la manera inhumana en la que se nos hablo, pone en peligro la democracia de hoy, ya que este es el poder judicial quien no nos da las respuestas a los reclamos”.
En el transcurso de la tarde se realizo un mural con mosaiquismo en memoria del joven Alegre, en las intercesiones de Caseros y Mariano Moreno en pleno centro de la ciudad de Córdoba, organizado por el Colectivo de Jóvenes por Nuestros Derechos, organización que ha acompañado desde el principio a Viviana Alegre en su incansable lucha.
Ya caída la tarde en la ex plaza Velez Sarfield se concluyo con un acto donde estuvieron presentes organizaciones sociales, políticas y de DDHH, familiares de las víctimas de la represión del estado. En la concentración que comenzó alrededor de las 19 hs se realizo el cambio de nombre de la plaza por “Facundo Rivera Alegre”, se realizo la lectura de un documento central y de las adhesiones que se fueron acercando. Hablaron los familiares víctimas de la represión del estado, la mama y la hermana de Luciano Arruga, la mama de “Kiki” Lezcano, madres representantes de Las Madres de la Gorra y familiares del joven Ezequiel Reinoso, joven baleado por la espalda el pasado sábado por la policía al esquivar un control mientras se dirigía a jugar al fútbol. La jornada concluyó con un festival de música donde tocaron La Cruza y Perro Verde, que también han acompañado esta lucha desde el comienzo
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